En la explicación de lo que es la globalización emergen diversas metáforas -aldea global, fábrica global, tierra patria, nave espacial, nueva Babel entre otras-, todas ellas hacen alusión al desvanecimiento de fronteras, donde lo nacional se convierte en provincia de lo global, con la consecuente desterritorialización y reterritorialización de cosas, gentes e ideas, promoviendo el redimensionamiento de espacios y tiempos. Como síntoma de esta inquietud, Quivera recoge en esta ocasión diversas reflexiones que nos llevan a meditar sobre la necesidad de replantear las tradicionales formas de análisis de lo territorial; al tiempo que nos permiten considerar la posibilidad de abrir nuestros estudios a nuevos horizontes de inteligibilidad. Se presentan propuestas que sugieren la necesidad de reconocer el derrumbe de paradigmas tradicionales, su replanteamiento y acaso la emergencia de otros nuevos, alternativos y simultáneos, inmersos todos ellos en la vorágine globalizadora.